LECCIONES DE LA HIGUERA
ESTÉRIL23 de Junio

"Haced,
pues, frutos dignos de arrepentimiento." Mat. 3: 8.
Deseo fervientemente
que quienes han estado creando disensión y lucha se convenzan de su error, se
arrepientan y se conviertan. Diga esto a la gente: "Aún por un poco está la luz
entre vosotros; andad entre tanto que tenéis luz, para que no os sorprendan las
tinieblas" (Juan 12: 35). Puesto que el tiempo es corto necesitamos ocupamos
diligentemente de los negocios del Rey. Hace dos noches tuve una visión
en la que me parecía estar dirigiéndome a un grupo de nuestro pueblo. . . Yo
estaba diciendo: "Tengo una advertencia para quienes han estado trabajando a fin
de destruir la influencia de los mensajes que el Señor ha dado a sus siervos.
Hay algunos que durante años han ido extendiendo sus raíces hasta puntos
distantes, pero la producción de sus frutos para Cristo está representada por la
higuera estéril. . ." Debemos mantener constantemente delante de
nosotros la lección de la higuera estéril. No es una mera profesión de justicia
lo que satisfará las necesidades del mundo actual y cumplirá la voluntad de Dios
para la familia humana. Dios está buscando ramas fructíferas. "Alimenten mis
ovejas con forraje puro", es el mandato del Señor a quienes actúan como maestros
del Evangelio de salvación. El ha hecho provisión para que el poder salvador del
Evangelio sea presentado en todas partes. Se me mostró que se han
cometido errores que dejaron impresiones equivocadas sobre las mentes, debido a
que se permitió que hombres deficientes en la gracia salvadora del Evangelio,
que no hicieron de la pureza y la sencillez una parte de sus vidas, y que no
buscaron a Dios a menudo en humilde oración fervorosa, presidieran al tratarse
intereses importantes. No consideraron que las obras rectas y abnegadas debían
constituir una parte necesaria de la experiencia cristiana. No veían la
necesidad de tener el Espíritu de Cristo y de imitar su ejemplo en la obra del
ministerio. Escuché palabras de advertencia y súplica dirigidas a los jóvenes,
en las que se les imploraba hacer una entrega completa y obtener una conversión
cabal. Se exhortó a los ministros a que hicieran cambios definidos. Se
me presentó al Salvador como estando delante de la congregación y dirigiéndose a
quienes habían estado desanimando y obstaculizando la obra de otros. Se dijeron
las siguientes palabras: "Quiebren todo yugo. Están retrasados en años en la
proclamación del plan de la redención. Sea cada uno comisionado por Aquel que
mora en la verdad y la justicia. Que todos se coloquen en una correcta relación
con Dios, realizando una obra de arrepentimiento cabal". Presentemos
nuestro caso ante el trono de la gracia. . . Oro para que ahora se experimenten
conversiones cabales (Carta 202, del 23 de junio de 1908, dirigida a S. N.
Haskell, presidente de la Asociación de California, EE. UU).
No hay comentarios:
Publicar un comentario